La Liga, ¿es cosa de dos o de tres?

Ya se ha vivido la jornada futbolera del sábado. Y como esta semana vuelve la Champions, los equipos que disputan está competición jugaron sus partidos en la tarde de ayer.

Y tras once jornadas, parece que el lío de la Liga va a estar entre Real Madrid y Barcelona, pero sin hacer ruido y en el último vagón de ese tren se encuentra escondido el Sevilla.

Y es que el undécimo asalto ha mostrado que el Barcelona juega bien y mucho a esto del balompié, pero ya no arrasa como el año pasado. Los azulgranas tienen una revolución menos que la temporada anterior y ya no tienen el veneno que mataba a sus rivales en media hora. Anoche se dejaron dos puntos en San Mamés, y no porque el Atletic de Caparrós hiciera el mejor partido de la temporada. No, los leones realizaron el fútbol que ellos saben hacer… balones largos y juego vertical. Y no es que el Barcelona hiciera su peor partido del año. No, los de Pep Guardiola tocaron, tocaron y tocaron. Con estos dos sistemas de juego, lo normal es que los catalanes hubiesen ganado por sexta vez consecutiva a los vascos, pero el partido acabó 1-1 gracias a un Toquerazo. Por lo que todo parece indicar que si el Barça quiere llevarse la Liga tendrá que empezar a envenenar a sus rivales.

Y no por nada, sino porque el Real Madrid se ha vuelto a poner al volante de este tren. El equipo que no convence con su juego, el conjunto que ha sido eliminado por un segunda B de la Copa del Rey, la escuadra de los conflictos y eternos debates, el club que lidera ahora mismo la Liga BBVA. Y es que es cierto que el club merengue ayer sólo fue superior al Racing en el marcador, porque los cántabros pudieron dar la sorpresa. Pero lo que mandan son los resultados y lo cierto que si hoy acabara el campeonato doméstico los de Pellegrini serían campeones.

Y sin hacer ruido, y tampoco quieren para no molestar hasta el final, se encuentra el Sevilla. Un equipo que si convence con su juego, pero que parece faltarle un poco más de confianza para ponerse a conducir este tren, que más que un tren parece un AVE por el ritmo que imponen los de arriba. Sin embargo, y aunque las apuestas no lo pongan como favorito, los de Manolo Jiménez están a tan sólo un partido del liderato y eso no se los quita nadie.

Queda mucha Liga, pero cada vez menos candidatos.